Como quizás imagines, el término inglés empowerment guarda cierta relación con la acepción de empoderamiento que tanto se lleva utilizando en los últimos años asociado al movimiento feminista.
Sin embargo, no van exactamente por ahí los tiros, ya que el empowerment sí tiene que ver con el empoderamiento pero, en este caso, con el empoderamiento laboral. O dicho de otra forma, con la potestad para tomar decisiones en el trabajo.
El empowerment es una nueva filosofía empresarial que está teniendo gran éxito, ¿te gustaría saber cómo puede mejorar tu organización? Pues te lo contamos aquí.
¿Qué es el empowerment?
Este extranjerismo, proveniente del inglés, se basa en palabras que significan ‘poder’, ‘habilitar’, ‘facultar’ o ‘permitir’.
Aplicado a los entornos laborales, el empowerment consiste en dar poder a otros miembros del equipo de trabajo para que puedan tomar sus propias decisiones, delegando en ellos la capacidad de decidir y transmitiéndoles el sentimiento de que son dueños organizativos de su trabajo.
Se trata de una nueva filosofía empresarial que facilita a los trabajadores la información, los medios y el poder necesario para que hagan un uso responsable y eficiente de los mismos con el fin de alcanzar sus objetivos y cumplir con la producción.
A través de esta metodología / forma de entender la organización de la empresa, la toma de decisiones ya no depende de un jefe central o un encargado de departamento sino que son los propios trabajadores los que tienen autoridad, crítica y responsabilidad para desarrollar y organizar sus actividades cotidianas e introducir aquellos cambios que consideren oportunos.
¿Cómo se concreta ese empowerment?
Pero, ¿de qué tipo de poder para decidir estamos hablando? Pues aquí dependerá de cada empresa y del tipo de actividad que desarrolle.
En algunas, serán decisiones tan sencillas como ajustar plantillas de horarios sin tener que tener el beneplácito del jefe o el encargado de sección, agilizando así la organización y aprobación de cambios relacionados. Y en otras, se dará potestad para decidir cuestiones más importantes como la compra o renovación de material o el poder acudir a una empresa de servicios de asistentes virtuales para contratar a una persona externa que eche una mano en un proyecto puntual en el que se necesite.
La cuestión se basa en saber delegar la potestad de tomar decisiones sobre una determinada labor a las personas que directamente están involucradas en ella, conocen a la perfección cómo se desarrolla, tienen las habilidades específicas para hacerlo y saben qué decisiones tomar en momentos puntuales.
Ventajas del empowerment
Este modelo de gestión busca la autonomía de los empleados proporcionando un contexto favorable para que el talento salga a relucir y se desarrolle con más rapidez. Con esta forma de trabajar se consiguen algunas ventajas como:
- Reconocer más fácilmente las ideas y el esfuerzo de cada trabajador.
- Impulsar la autoestima y la confianza de los trabajadores.
- Fomentar el trabajo en equipo.
- Establecer una cultura de la responsabilidad.
- Romper el tradicional modelo de jerarquía en la organización.
- Dar a los empleados la oportunidad de aportar, crecer, rendir más…
- Solucionar los problemas de manera más rápida y efectiva y sin tantos pasos y tiempos de espera intermedios.
- Mejora el clima laboral.
Esto genera involucración y compromiso por parte de los trabajadores, y en consecuencia, también se fomenta la retención del talento por parte de las empresas, uno de sus mayores retos en la actualidad.
¿Habías oído hablar de esta filosofía laboral? Como empresa que apuesta por delegar en otras personas, en este caso, en asistentes virtuales especializados, en Delegarte nos parece una forma muy acertada de concebir el trabajo y conseguir una mejor organización que beneficia a todas las partes.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.